Un día como hoy hace 26 años, mi papá Nicolás Quírico Valdez nos dejo físicamente. Sin embargo, cada día desde ese momento ha estado con nosotros. Nos ha acompañado con su ejemplo, su determinación, su compromiso, su sonrisa su lucha y defensa por los trabajadores. Por los que viven en condiciones de riesgo, de vulnerabilidad.

Hoy, como el 9 de septiembre celebramos su vida. Porque seres humanos como él, viven para siempre, solo cambian su forma de vivir.

En mi caso, le agradezco haberme dado la vida. Haber tenido la fuerza y el amor, de ser un excelente padre. De enseñarme el camino de la libertad, de la lucha, de la democracia. De no doblegarnos por nuestras ideas. De ser fuertes en los momentos difíciles.

Su honestidad, su compromiso ético. Su transparencia nos indican el camino a seguir.Hoy y siempre.

Nicolas Quírico Valdez esta aqui. Lo siento aqui. Prefsente. En cada segundo de lucha. No puedo dejar de recordar la frase que le dijo a la periodista Felicia Gonzalez pocos meses antes de su partida definitiva cuando ella le pregunto sobre las consecuencias de la caida del muro de Berlin y la perestroika. Y con la firmeza de siempre le respondió "Estoy seguro que los pueblos del mundo sabrán encontrar el camino de su libertad".

Hoy más que nunca esas palabras, tienen que darnos la fuerza para seguir luchando por una mundo en el que haya justicia. En el que el bienestar y la calidad de vida de la gente sea el centro de las políticas públicas. En el que los derechos y la dignidad de las personas, sea lo esencial para construir un sociedad de equidad.De Paz. De amor.

Gracias por siempre Papá!!!!